REVIEW: ALADDIN

Recomendación de Ayelén Vegagil Espósito

Ficha técnica

Dirección: Guy Ritchie

Guión: John August y Guy Ritchie

Basada en: Aladdin (Disney) de Ron Clements – Aladdin y la lámpara mágica del “Las Mil y Una Noches”

Producida por: Walt Disney Pictures

Música: Alan Menken

Género: Musical

Cast: Will Smith, Mena Massoud, Naomi Scott, Marwan Kenzari, Navid Negahban y Nasim Pedrad.

Sinopsis

Versión live-action de Aladdin. Una lámpara mágica cambiará el destino de Aladdin, un joven callejero a través de los deseos concedidos por el Genio de la lámpara. Mientras el malvado Jafar intenta conseguirla para convertirse en el Sultán más poderoso de Agrabah.

Mi opinión:

¡Qué peliculón! Sí, así es como debo calificar esta versión Live-Action que superó todas mis expectativas y me voló la peluca que no tengo. Y es que Guy Ritchie no me generaba ninguna expectativa y los avances me hacían tenerle un poco de miedo, ya que como buena niña nacida en los 90’s, Aladdin fue una de las películas con las que crecí y temí porque fueran estropear su esencia, algo que lamentablemente sentí que sucedió con Maléfica o Alicia en el País de las Maravillas. Todas ellas intentaron darle un poco de sus versiones animadas, algunas fallando estrepitosamente (en lo que a mí respecta, en el caso de La Bella y la Bestia podía haber sido mejor si no hubiese sido por los efectos especiales tan mediocres que le pusieron). Aunque nada me quitará decir que la mejor versión Live-Action de una película animada de Disney a la fecha es 101 Dálmatas (1996) protagonizada por Glenn Close, Jeff Daniels y Joely Richardson.

Para hablar de esta versión de Aladdin es necesario hablar de Guy Ritchie, el director, quien es muy conocido por sus películas de Sherlock Holmes, El Rey Arturo y la reciente Robin Hood, las cuales tienen una cinematografía única y muy personal de Ritchie, ya que en las secuencias de acción siempre hay cámara lenta y planos detalle que hacen que se te acelere el corazón. Ese recurso lo utiliza también en Aladdin y realmente funciona, especialmente en las escenas de finales de acción, las cuales logran mantenerte en el vilo del asiento.

Si bien la película no es un copy-paste de la versión animada y las cosas que fueron modificadas le agregan algo especial a la historia, se nota que es un homenaje. Por un lado tenemos los cambios grandes en el arco histórico de la princesa Jasmine, que ya como viene sucediendo con las otras películas en Live-Action, nos muestra una faceta más guerrera, independiente y feminista. Esta Jasmine es similar a su contraparte animada, pero tiene un leve detalle: no quiere casarse, ella quiere ser la Sultana y gobernar sobre su pueblo, Agrabah. Esto no se nota forzado dentro de la trama, es más se puede percibir un poco del legado de Mulán y Elsa en este giro de su arco, sin dejar de ser Jasmine. Naomi Scott la rompe en su papel, desde su actuación hasta sus números musicales, lo único que lamento es que no responda a la etnia de la Princesa a la que le da vida.

A esta versión se le tenía miedo especialmente por lo que podía llegar a hacerle al emblemático genio, ese sidekick azul que marcó a muchos con su encanto, su humor y sabiduría, mismo al cual le dio vida Robin Williams en la versión animada (los caricaturistas incluso adaptaron la animación a los gestos de este genio del humor). Acá abro un paréntesis para contarles el por qué todos estaban muy al pendientes de esto: cuando Williams le dio la voz al genio, no sabía que esto lo catapultaría aún más en su creciente carrera icónica humorística, especialmente con la generación de niños (hoy adultos) que verían la película. La voz del genio sería legendaria y Disney quería poder hacer de ella lo que pasó con las voces de Mickey y sus amigos (siempre se han mantenido similares o iguales a las “originales”), algo a lo que Williams se negó rotundamente, lo que provocó que el Genio cambiase su voz en la segunda película de Aladdin: El Regreso de Jafar. Más allá de esta disputa, lo que entró en mucho debate fue si Will Smith iba a estar a la altura de las improvisaciones, los chistes y el carisma que Williams le dio al Genio. Por eso quiero recalcar que tienen que ir al cine pensando en despojarse de la imagen del Genio animado, porque el Genio de Will Smith es único, sí toma el legado de Williams, pero con la autenticidad y humor que lo caracterizan. De hecho su Genio podría equipararse un poco con la personalidad de su personaje de la serie El Príncipe de Bel Air. Así que si me preguntan si me gustó este Genio les responderé que sí y que me encantaron los giros que le dieron, es una mezcla entre los rasgos del Genio animado y su versión de Broadway.

La joven revelación de la película se trata de Mena Massoud el chico que le da vida a Aladdin y de la que estoy segura que veremos mucho en un futuro. Me encantó la frescura que le dio a su personaje, la química con Will Smith no fue forzada y los momentos clave entre sus personajes salieron de manera natural. Me reí muchísimo con su torpeza y me dejó sin aliento con sus acrobacias. El chico es sin duda un diamante en bruto, listo para ser pulido por Hollywood.

Lo que tengo para criticar es lo flojo que se vio el villano, Jafar tiene más poder en la versión animada, lo cual es una lástima. Me hubiese gustado ver más de Abu en versión elefante, algunas cosas icónicas del viaje en la alfombra de Jasmine y Aladdin durante la canción de Un Mundo Ideal y los brazos de Genio en su versión Genio, le pusieron un cuerpo enorme con brazos pequeños o al menos esa es la ilusión óptica que se genera y a mí me chocó muchísimo.

Las canciones de Alan Meken siguen intactas, a excepción de algunas letras de Noches de Arabia (al fin borraron los controversiales versos que implicaban que la cultura árabe es violenta) y la adición de la canción ‘Speechless‘ (Callar) el solo de la Jasmine del que todo el mundo está hablando y que seguro se verá impulsada en la carrera por una estatuilla dorada el próximo año (habrá que ver qué tan reñida estará la competencia con su hermana “El Rey León”). Lo mejor es que los números musicales han sido ambientados con el esplendor de Bollywood dándole una apariencia teatral a la película que atrapa y te invita a querer cantar y bailar las canciones.

A este Live-Action que me dio más de lo que esperaba le doy una calificación de 4 estrellas. Así que ya saben, si no tienen planes aún para el fin de semana corran al cine y embárquense en un viaje con la magia de la alfombra de Aladdin, es un viaje que disfrutaran muchísimo, más si lo hacen en familia o con amigos.

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